Instrucciones para el uso de un tapa flip top
Apr 3, 2020
El cierre de flip top es un tapón de una pieza con un cuerpo y una tapa conectados por una bisagra. La bisagra permite que la tapa se cierre en el cuerpo del tapón, que normalmente cuenta con alguna clase de hueco para el dedo permitiendo al usuario abrir el tapón más fácil y cómodamente. En las versiones más actuales de los tapones flip top, la tapa también tiene un ligero saliente que crea una superficie aún mayor para abrir el tapón. Cuando se abre el producto, el líquido fluye a través del orificio del tapón flip top al apretar el bote inferior.
La tapa cuenta con un pasador que cierra el orificio del tapón. El diámetro del pasador es ligeramente mayor que el orificio, lo que evita que la tapa se abra por accidente. La fuerza de apertura de los cierres flip top tiene rangos particulares correspondientes a la resina y los colorantes utilizados en su producción.
Los tapones flip top disponen de orificios con una amplia variedad de diámetros, que van de 1 a 10 mm, ya que sirven para dispensar productos con diferentes viscosidades.
En la parte trasera del tapón flip top, el cuerpo y la tapa se conectan mediante una bisagra. La bisagra es una de las partes más críticas del cierre flip top, ya que tiene una función activa. Los usuarios solo tendrán que mover la tapa ligeramente para que la bisagra comience a presionar la tapa hacia atrás. Existen distintos diseños, como bisagras de mariposa o de eje doble, que satisfacen todas las necesidades del mercado.
La versión roscada de los tapones flip top está dirigida al sector regido por la normativa SPI o GCMI, con tamaños 20-410, 24-410 y 28-410; otros diámetros, como las medidas de 15 y 18 mm, también están disponibles según la norma DIN.
Los tapones flip top se utilizan ampliamente para la dispensación de productos líquidos. Los cierres flip top están disponibles en diferentes estilos y diseños, pero las principales variedades son versiones roscadas o de cierre a presión
La mayoría de los tapas flip top tiene una junta que se cierra hermeticamente en el cuello de la botella. La principal ventaja de este sistema de cierre es que la friccion entre el diametro exterior de la junta y el diametro interior del cuello de la botella evita que la tapa se desenrosque.
Los cierres flip top a presión se utilizan principalmente para champús y acondicionadores. Esta clase de tapones tienen un collarín en la parte interior con un reborde de retención insertado a presión en el cuello de la botella mediante la aplicación de fuerza vertical.
El cuello de botella incorpora un reborde en el que se encaja el anillo de retención, conformando de esta manera un cierre a presión del tapón.
La últimas versiones de los tapones flip top disponen de un diámetro más grande debido a los cierres flip top de los tubos. La serie flip round consta de botellas específicamente diseñadas para adaptarse a los tapones flip top con el mismo diámetro. Esto produce un cilindro perfecto con líneas simples. Como el cuello de botella dispone de una característica especial, el extremo delantero del tapón flip top siempre está orientado hacia el extremo delantero de la botella.
Los tapones flip top disponen de orificios con una amplia variedad de diámetros, que van de 1 a 10 mm, ya que sirven para dispensar productos con diferentes viscosidades.
En la parte trasera del tapón flip top, el cuerpo y la tapa se conectan mediante una bisagra. La bisagra es una de las partes más críticas del cierre flip top, ya que tiene una función activa. Los usuarios solo tendrán que mover la tapa ligeramente para que la bisagra comience a presionar la tapa hacia atrás. Existen distintos diseños, como bisagras de mariposa o de eje doble, que satisfacen todas las necesidades del mercado.
La versión roscada de los tapones flip top está dirigida al sector regido por la normativa SPI o GCMI, con tamaños 20-410, 24-410 y 28-410; otros diámetros, como las medidas de 15 y 18 mm, también están disponibles según la norma DIN.
Los tapones flip top se utilizan ampliamente para la dispensación de productos líquidos. Los cierres flip top están disponibles en diferentes estilos y diseños, pero las principales variedades son versiones roscadas o de cierre a presión
La mayoría de los tapas flip top tiene una junta que se cierra hermeticamente en el cuello de la botella. La principal ventaja de este sistema de cierre es que la friccion entre el diametro exterior de la junta y el diametro interior del cuello de la botella evita que la tapa se desenrosque.
Los cierres flip top a presión se utilizan principalmente para champús y acondicionadores. Esta clase de tapones tienen un collarín en la parte interior con un reborde de retención insertado a presión en el cuello de la botella mediante la aplicación de fuerza vertical.
El cuello de botella incorpora un reborde en el que se encaja el anillo de retención, conformando de esta manera un cierre a presión del tapón.
La últimas versiones de los tapones flip top disponen de un diámetro más grande debido a los cierres flip top de los tubos. La serie flip round consta de botellas específicamente diseñadas para adaptarse a los tapones flip top con el mismo diámetro. Esto produce un cilindro perfecto con líneas simples. Como el cuello de botella dispone de una característica especial, el extremo delantero del tapón flip top siempre está orientado hacia el extremo delantero de la botella.